Antes de convertirse en blanco de la violencia política y recibir un disparo en el cuello en pleno acto público en la Universidad del Valle de Utah, Charlie Kirk escribió en su último mensaje en X sobre el brutal asesinato de la joven ucraniana Irina Zarútskaya, responsabilizando precisamente a la política de lo sucedido.
"Si queremos que las cosas cambien, es 100 % necesario politizar el asesinato sin sentido de Irina Zarútskaya, porque fue la política la que permitió que un monstruo salvaje con 14 antecedentes anduviera libre en las calles para matarla", denunció Kirk.
El asesinato de la refugiada ucraniana de 23 años tuvo lugar en agosto en un tren de la ciudad de Charlotte, Carolina del Norte (EE.UU.). Decarlos Brown Jr., un afroamericano de 34 años, la apuñaló en el cuello con un cuchillo plegable, provocando su muerte.
Acusado de homicidio en primer grado, Brown cuenta con múltiples arrestos desde 2011. Su historial delictivo incluye hurto, robo con arma peligrosa y amenazas. El atacante es una persona sin hogar que cumplió cinco años de prisión por el cargo de robo con arma letal. En enero de este año fue arrestado también por uso indebido del sistema de emergencias 911.
Tras quedar detenido por el asesinato de Zarútskaya, declaró creer que alguien le había dado un material sintético que controlaba sus acciones, como comer, caminar y hablar. La Policía solicitó una evaluación de su salud mental, mientras su abogada, la defensora pública Brianna Buford, presentó una moción cuestionando la capacidad de Brown para proceder. Actualmente, la investigación sigue en curso.
