Un polémico grupo de jóvenes extranjeros, de nacionalidad española, rentaron un inmueble hotelero en la costera ciudad de Puerto Escondido, una zona turística de México ubicada en el estado de Oaxaca, al suroeste del país, y sus publicaciones recientes en redes sociales han causado polémica, especialmente porque en una de ellas hacen destempladas críticas a los dueños y piden ayuda "a cambio de hospedaje".
"Tengo el hotel hecho mierda y en dos horas llegan mis primeros huéspedes. Parece que los antiguos dueños no han limpiado en su vida, da puto asco, pero por mis huevos que estará presentable para el check in", dice uno de los españoles en un video colgado en la cuenta @Polseuma en TikTok e Instagram*, donde además admite que abrirá un hotel "sin tener idea de hotelería".
En la grabación se puede ver a los arrendatarios echar abajo la cocina del lugar y admitir que se les hace imposible tener todo en orden para cuando lleguen turistas. Por tal motivo, piden ayuda a sus seguidores y a gente que quiera colaborar "a cambio de hospedaje" para que actúen como "voluntarios" y reconstruir el hotel solo con material reciclado o proveniente de la "naturaleza".
Puerto Escondido ya no pertenece a los mexicanos. El 90% de la población es extranjera.
— 𝙰𝚕𝚍𝚘 𝙱𝚎𝚍𝚘𝚕𝚕𝚊 (@Bedollaa_a) September 9, 2025
La cuenta, que tiene más de 42.000 seguidores en TikTok y más de 38.000 en Instagram*, también muestra otra variedad de videos en los que se han sumado personas de la comunidad local para ayudarlos a reformar el hospedaje turístico y construir parte de los muebles del lugar con madera abandonada o "empujada por el mar" en las zonas aledañas.
Sin embargo, algunos usuarios de las redes señalan que este grupo de extranjeros forma parte de las personas adineradas de otros países que llegan al país para comprar propiedades y empujar a los locales hacia otras partes, proceso conocido como gentrificación. El fenómeno ha sido denunciado ampliamente por organizaciones sociales y de derechos humanos para hacer visibles los desplazamientos forzados de mexicanos fuera de sus históricas zonas de origen.
En los comentarios de los usuarios, algunos denuncian al grupo de españoles por "explotación", por pedir a "voluntarios" que trabajen sin percibir una remuneración monetaria a cambio. Otros piden a las autoridades que revisen si los arrendatarios realizan esos trabajos en concordancia con la ley, o si por el contrario deben ser castigados por sus acciones.
Petición de disculpas
En medio del escándalo, los españoles colgaron en las últimas horas un video para disculparse con la sociedad mexicana y expresar su punto de vista sobre los señalamientos que les han hecho, especialmente por el de gentrificación y explotación.
"La hemos cagado y lo recocemos. Queremos pedir disculpas al pueblo mexicano y en especial a toda la comunidad de Puerto Escondido. Subimos un video pidiendo donaciones para un proyecto y entendemos perfectamente el enojo que ha causado. Nunca quisimos faltar al respeto ni jugar con algo tan serio, no estuvo nada bien por nuestra parte y queremos pedir una disculpa sincera", dice uno de ellos.
También intervino uno de los residentes locales que colaboran con los españoles en las obras del hotel, y dijo que él no está siendo explotado, sino que trabaja voluntariamente con sus "amigos" y no con "patrones". Para él, estos jóvenes son "unos chicos" que llegaron a México para "seguir un sueño", al "igual" que muchos otras personas migrantes.
Luego intervino otro español, quien aclaró que el inmueble no es comprado sino rentado a una empresa local, y que ellos, desde que llegaron a México, han regularizado todos los trámites legales necesarios para funcionar como hotel y realizar las operaciones pertinentes a su empresa.
Además, el grupo admitió "los errores" cometidos y expresó su voluntad de "aprender e integrarnos y construir un proyecto que respete y sume a la comunidad".
"Entendemos toda la preocupación que hay en todo México con el tema de la gentrificación y también aquí en Puerto, y sí que es verdad que nos falta un poco más de conciencia y de aprender. Estamos abiertos a escuchar a cualquier persona que quiera venir acá a explicar la gentrificación. Somos jóvenes y nos equivocamos, estamos acá para aprender y trabajar con más ética", dijo el que más visibilidad tiene en los videos, al también pedir perdón por sus acciones.
* Perteneciente a Meta, calificada en Rusia como organización extremista, cuyas redes sociales están prohibidas en su territorio.